Coaching y Producción

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¿Qué tienen en común los Beatles, Nirvana, y la Orquesta Sinfónica de Minnesota? Cada uno de ellos tuvo la suficiente suerte de trabajar con un productor que les ayudó guiándoles durante la creación de una gran grabación. Los productores exitosos de música entienden que la colaboración iterativa es un ingrediente clave para la producción de grandes grabaciones. Los mejores productores aprendieron que el balance de la creatividad, las habilidades, el tiempo y el dinero son esenciales para lanzar grabaciones valiosas. Al igual que produciendo música, me doy cuenta que coachear proyectos agile (ágiles) es una artesanía que involucra llegar a conocer a la comunidad del proyecto, el producto que se está construyendo, las herramientas y las tecnologías. Los coaches exitosos balancean el desarrollo de habilidades, peticiones para el producto, tiempo y presupuesto, como una manera de lanzar software que es oportuno y valioso.

El proceso de producción de música

Cada canción sigue un proceso similar de grabación, mezclado, generación del master, y lanzamiento. Dentro del proceso cada canción sigue una jornada única. (Ver Figura 1) El productor ayuda a que las canciones sobrevivan el proceso de grabación guiando a los artistas a través del proceso de grabación similarmente a como un coach ayuda a un equipo a lanzar un producto de software.

Existen dos categorías de productores: productores prescriptivos, empujan a la gente a seguir el proceso y las técnicas que ellos han utilizado exitosamente; y productores descriptivos quienes tienden a guiar y enseñar con anécdotas. En lugar de decirle a la gente qué hacer, ellos sugieren ideas y motivan a los artistas a tomar riesgos y decisiones sobre la mejor manera de capturar su música.

Pre-producción. El tiempo dedicado en la preparación, antes del primer día en el estudio, vale mucho la pena para crear una sesión de grabación relajada y exitosa. La preproducción no debe prescribir el resultado de ninguna sesión de grabación, sino ayudar a aprender más sobre los artistas y la manera en que tocan como grupo. Si crees que un proyecto de software es mas difícil que un proyecto de grabación, entonces unos días en el estudio te podrán enseñar que el monto de emoción, miedo y volatilidad en el estudio, es normalmente mayor.

Las sesiones de grabación. Las sesiones de grabación es donde las canciones son cantadas y las pistas son cortadas. El proceso es absolutamente iterativo e incremental. Ayudando a la banda a enfocarse en cada canción, así como en la colección entera de canciones, el productor agrega continuidad. El productor trabaja con uno o más artistas, grabando y re-grabando partes separadas; y con el ingeniero de grabación de manera que la tecnología sea utilizada para ayudar a los artistas conforme su ejecución es capturada con fidelidad. El productor puede ayudar a asegurar que los artistas y la canción sean atendidos por la tecnología, en lugar de hacerse sirvientes de la tecnología.

Coaches de desarrollo de software como productores

Mi primera oportunidad para la creación de software fue en una pequeña compañía exitosa. Nuestra compañía trabajaba muy parecido a lo que hoy se entiende como ágil: teníamos juntas informales cortas, éramos dirigidos por resultados, y programábamos en pares aunque tan solo le llamábamos “trabajar juntos”. Conforme cambié a empresas más grandes se me pedía que siguiera diversos procesos que tan solo parecían frustrar a la gente. Como un acto de autopreservación le presté atención a los procesos ágiles que estaban emergiendo, éstos parecían proveer el monto de estructura al que me había acostumbrado durante mis primeras experiencias de software, y la experiencia era en mucho como el estudio de grabación.

Creo que me hice coach de manera más bien descriptiva que predictiva. Después de varios años de ofrecer coaching, busqué maneras de mejorarlo y aprender qué parte de cada proyecto exitoso tuvo que ver con el coaching y qué parte tuvo que ver con la comunidad o nuestro uso de métodos ágiles. Fue rápidamente claro que muchas de mis habilidades como productor habían sido transferidas a mi coaching. Mientras que los medios difieren, la labor del coach y del productor son muy similares. Ambos ayudan a la gente a crear su mejor producto con el tiempo, dinero, y tecnología disponibles. Donde el productor ayuda a los artistas a hacer grabaciones de las canciones, el coach ayuda a las comunidades de proyecto a hacer de los sueños del Product Owner un software funcional (ver Figura 2).

Preproducción. Muchos proyectos comienzan con algún tipo de preproducción a fin de crear el tiempo y espacio para que una comunidad esté lista para producir. Esto ofrece el mismo beneficio que en el mundo de la música. Usualmente agrego cuatro prácticas de preproducción al coaching:

  • Estatutos del proyecto.
  • Crear un backlog de producto inicial.
  • Espacio informativo de trabajo.
  • Iteración 0.

Intento asegurarme de que el monto de rigor de preproducción es apropiado para la comunidad que estoy coacheando. Por ejemplo, un equipo muy adaptivo puede completar estas cuatro fases en unos cuantos días. Contrariamente, un grupo grande y distribuido que está reemplazando un sistema complejo puede necesitar más tiempo de preproducción.

Estatutos de proyecto. Para ver mejor el valor del coach tomemos los estatutos de proyecto desde el punto de vista del coach. Muchos gerentes crean estatutos de proyecto, pero tristemente poca gente los lee porque probablemente son enterrados, no son compartidos, o la gente no toma pertenencia. La comunidad ágil tomó una herramienta existente y la hizo mejor mediante su transformación en una herramienta colaborativa. Los estatutos son creados por la comunidad para la comunidad. Son una forma para que se conozca la comunidad entre ella, el propósito del proyecto, la gente en la comunidad inmediata y extendida del proyecto, así como las fortalezas y riesgos que están por delante.

Las iteraciones tempranas. En el estudio, el corte de buenas pistas de soporte es esencial para producir un gran producto final. Conforme la banda graba y regraba cada canción comienzan a crear un buen estado de ánimo. En ocasiones ese estado crece orgánicamente, con intervención limitada del productor. Las iteraciones tempranas son un tiempo importante para generar vínculos y hábitos sanos. Cada iteración reta a la comunidad a reunirse en una forma tal que se entregue software funcional y una base de código sana de manera sostenible. Describo un par de ejemplos:

Ayudando a la Gente a Aprender. En lugar de meterse y tocar una parte para un músico que esta luchando por lograr algo, el productor utiliza sus habilidades y ve la manera de entender porqué el músico está teniendo dificultades. Un coach hábil encuentra el momento adecuado para ofrecer palabras de apoyo y el momento adecuado para dar un empujoncito.

Liderando y enseñando. Mientras que tu coach puede dirigir las primeras juntas o las sesiones de planeación de iteración, los mejores coaches saben que la ruta hacia el éxito sostenible se pavimenta permitiendo que la comunidad se encargue lo antes posible.

• Explicando porqué más que diciendo cómo. Ayudar a los artistas en el estudio a utilizar el proceso para capturar su música es mucho más importante que enseñarles a utilizar los aparatos. Agilidad sostenible es más común cuando la gente ve el valor de la práctica, en lugar de que tan solo se les diga cómo hacer la práctica.
• La importancia de dejarlo hecho. Mientras que el coach hace el trabajo con individuos, en otras ocasiones el trabajo es con la comunidad. El couching de éxito sostenible significa dejar que la comunidad
tome posesión y crezca su uso compartido.


Afinamiento continuo. Tanto el productor como el coach tienen trabajos difíciles que requieren de gran paciencia y liderazgo continuamente respetuoso. Coachear es un proceso continuo y no un evento. Cambios gracias al coaching suceden en una serie de pequeños momentos que incrementalmente se suman de manera sutil en pequeños eventos, que le ayudan a la comunidad a experimentar, examinar, y mejorar de pedacito en pedacito.

Conclusión

Ya sea que estés produciendo discos o software, decir historias es una de las herramientas más poderosas. Tú puedes decirle a la gente qué hacer, el estilo prescriptivo, pero puede que no te escuchen. En su lugar, diciéndoles lo que has hecho, el estilo descriptivo, inicia una discusión significativa.Una vez que las personas están metidas en el tema, el estilo descriptivo les permite aprender qué parte de tu experiencia puede ser útil.


Figura 1. El proceso de producción de música



Figura 2. El proceso de producción de software
 

Bio

David Hussman es fundador y director de DevJam, empresa norteamericana que se dedica a enseñar y coachear equipos
interesados en adoptar métodos ágiles. David ha coacheado a cientos de equipos ágiles en todo el mundo. Previamente, David se
dedicó a construir software para diversos dominios tales como audio digital, biométricos, salud y educación, por nombrar algunos.
@davidhussman